Hemos bautizado al Plan Estratégico de Bibliotecas Escolares y Lectura de Extremadura con el nombre de LAR. Este término procede de la palabra latina lares, ium, que designaba a los dioses protectores de la casa y la familia. Más tarde, el término adoptó en singular el significado metonímico de morada, hogar. Y este es, precisamente, el valor simbólico que queremos que adquieran nuestras bibliotecas escolares: un hogar que irradie luz y calor al resto del centro; un hogar donde soñar y vivir otras experiencias; un hogar donde aprender y encontrar respuestas.

Además, el término LAR, entendido como una sigla, nos ayuda a describir perfectamente lo que este Plan Estratégico de Bibliotecas engloba: Lectura, Alfabetizaciones y Recursos.

Hemos bautizado al Plan Estratégico de Bibliotecas Escolares y Lectura de Extremadura con el nombre de LAR. Este término procede de la palabra latina lares, ium, que designaba a los dioses protectores de la casa y la familia. Más tarde, el término adoptó en singular el significado metonímico de morada, hogar. Y este es, precisamente, el valor simbólico que queremos que adquieran nuestras bibliotecas escolares: un hogar que irradie luz y calor al resto del centro; un hogar donde soñar y vivir otras experiencias; un hogar donde aprender y encontrar respuestas.

Además, el término LAR, entendido como una sigla, nos ayuda a describir perfectamente lo que este Plan Estratégico de Bibliotecas engloba: Lectura, Alfabetizaciones y Recursos.

¿Por qué un plan estratégico?

Los resultados obtenidos en la primera encuesta de hábitos de lectura, que ha realizado la Consejería de Educación y Empleo, muestran un descenso del índice lector en la ESO y Bachillerato con respecto al alumnado de Educación Primaria.

De igual forma, la actitud ante la lectura del alumnado de Educación Primaria es muy positiva, mientras que en la ESO y Bachillerato, aunque creen que les ayuda a comprender el mundo que les rodea, ven más divertidas otras actividades y un alto porcentaje piensa que para tener cultura no hace falta leer libros.

También se detecta un descenso en la utilización de las bibliotecas, en los mismos niveles, con respecto a la Educación Primaria. Incluso, en los datos extraídos del profesorado, esta disminución en la utilización de las bibliotecas, en general, y la escolar, en particular, puede apreciarse.

Es necesario implementar políticas educativas que reviertan la situación de forma drástica a medio y largo plazo, adaptando los recursos físicos y humanos de las bibliotecas escolares a la realidad del siglo XXI, haciéndolas núcleos irradiadores que generen cohesión social y que faciliten que el alumnado domine el discurso oral y escrito, el acceso al conocimiento y la competencia global, facilitando la actitud crítica.

Objetivos del Plan Estratégico

Este plan pretende incidir sobre las principales causas que afectan al bajo índice lector de una parte del alumnado extremeño, en especial de la ESO y Bachillerato. Por tanto, se expresan como principales objetivos los siguientes:

 

      • Mejorar el índice de lectura y de comprensión lectora del alumnado.
      • Potenciar las alfabetizaciones múltiples del alumnado, tanto las competencias de lectura, como de escritura, para la utilización crítica de la información.
      • Conseguir que todos los centros educativos públicos de niveles previos a la Universidad cuenten con una biblioteca escolar con un nivel adecuado de recursos y lograr que una buena parte del profesorado la utilice en la práctica docente diaria.
      • Garantizar que todos los centros educativos sostenidos con fondos públicos cuenten con un Plan de Lectura, Escritura y Acceso a la Información (PLEA).
      • Conseguir que todo el profesorado incorpore el fomento de la lectura como uno de los objetivos prioritarios de sus programaciones, para mejorar el índice de comprensión lectora del alumnado.

Y no te quedes corto en el pedir. Cuanto más difícil sea el plan, más orgulloso estarás de él, y si es imposible, mejor aún, porque en el fracaso tendrás también la gloria.

Luís Landero (Juegos de la edad tardía)

PDF del libro

Línea estratégicas del Plan

Líneas estratégicas del Plan

Línea 1. Bibliotecas Escolares como impulsoras del cambio

Las bibliotecas escolares deben evolucionar desde un modelo que ponía el énfasis en tener libros en grandes cantidades, a otro modelo mediador en el que lo importante es encontrar y seleccionar los recursos más adecuados y con mayor calidad, en un entorno multisoporte, multiformato y distribuido, para ponerlos a disposición de los usuarios (alumnado y profesorado), siendo estos el centro de las actuaciones, que se resumen en mediar, comunicar, difundir y distribuir.

Línea 2. Planes de lectura para la alfabetización múltiple

Los equipos directivos de los centros educativos deben establecer como uno de sus principales objetivos contar con un plan de estas características, que facilite que su alumnado, al terminar sus estudios, disponga de las competencias necesarias para comprender lo que lee, comunicar de forma escrita y oral, y tenga las destrezas necesarias para encontrar la información que necesite y la transforme, de forma crítica, en conocimiento. En definitiva, convertirse en ciudadanos responsables del siglo XXI.

Línea 3. En red para la innovación

Las medidas enumeradas en esta línea estratégica deberán ir encaminadas a la innovación y a la profundización en la colaboración dentro de la Red de Bibliotecas Escolares de Extremadura, así como a mejorar su regulación y los apoyos desde la Administración educativa.

Línea 4. Bibliotecas en continua formación y actualización

Independientemente de las iniciativas que la Administración educativa lleve a cabo para potenciar la formación en este ámbito, los docentes deben asumir su responsabilidad en el proceso e interiorizar las actitudes del aprendizaje a lo largo de toda la vida, a través de la autoformación y la participación en redes de colaboración.

Nosotros somos los únicos posibles artífices de nuestro futuro. En un mundo en el que casi todas nuestras industrias parecen amenazarnos con sobreexplotación, sobreconsumición, sobreproducción y un crecimiento ilimitado que promete un paraíso codicioso y glotón, la sosegada consideración que un libro nos exige puede obligarnos a detenernos a reflexionar, a preguntarnos, más allá de falsas opciones y absurdas promesas de paraísos, qué peligros nos amenazan realmente y cuáles son nuestras verdaderas armas.

Alberto Manguel, Una historia de la lectura.